Bornos tiene su origen en una alquería de época, situada al pie del Alcázar del Fontanar, cuyo población se dedicaba, mayoritariamente, a la agricultura. Este pueblo está enclavado a orillas del Río Guadalupe y fue declarado “Bien de interés Cultural”, por la junta de Andalucía.
Este pueblo es conocido como la cuna del renacimiento en la Baja Andalucía, debido a que guarda decenas de monumentos de la época. Bornos es, después del Arco de la Frontera, uno de los pueblos blancos con mayor número de edificaciones de época.

Historia de Bornos
Esta zona de España guarda muchos años de historia, se han encontrado rastros de los primeros restos humanos que datan del paleolítico inferior, hace unos 30.000 años. Existen también restos que atestiguan presencia íbera y romana.
Aquí existió la ciudad de Carissa, uno de los primeros municipios romanos y posteriormente Cives Romani, con derecho incluso a acuñar moneda propia, durante el mandato de Vespasiano.
La historia modera, habla de que la población actual fue creada alrededor del alcázar del Fontanar. Fue tomada por las tropas cristianas a mediados del siglo XIII. Alfonso X el Sabio, entregó la población a Per del Castel, caballero gaditano.
En esta época la población se vendió varias veces y otras tantas se cambió. En el año 1398, fue vendida a Bornos por un monto de 3.000 doblas. De esta manera, permaneció bajo el dominio de la Casa de Alcalá hasta la independencia municipal, siendo su vinculación tal que el blasón de los Ribera y el escudo de la población son idénticos.
Bornos en la actualidad
Actualmente, Bornos es una ciudad autónoma de Andalucía y cuenta con más de 7.500 habitantes. Es un pueblo lleno de contrastes donde aún se guarda mucha de las tradiciones. Cada año el recinto ferial se abarrota de bornenses que habitan en el pueblo, y otros tantos que viven en otras provincias y siempre vuelven a su pueblo de origen.
Los alrededores, la gastronomía, la gente y de fondo la serranía hacen que este pueblo blanco sea un destino predilecto de los españoles.